Lo que llamamos “dinero” no son más que dígitos de computadora y papeles impresos que no tienen valor intrínseco alguno. El actual modelo financierista lo sostiene para sustraer la riqueza de las mayorías y transferirla al pequeño grupo que detenta la facultad de crear dinero de la nada, emitiendo crédito y “dinero” irrestricta e irresponsablemente.
Publicado en 2006